viernes, 16 de mayo de 2014

Los beneficios y la importancia de tener un animal de compañía


En primer lugar, y antes de comenzar a hablar nada sobre el tema, quiero “aclarar” varios puntos:

1-  Durante el texto, cuando me refiera a “compañero de vida”, me estaré refiriendo a animal de compañía. El motivo por el que utilizo este término es porque, aparte de que me gusta más, yo creo que los animalitos que decidimos que nos acompañen en nuestra vida son eso, compañeros de vida, y no un simple animal.

2-  Aunque hable de los animales en general, mayormente me centraré en lxs perrxs, ya que son mi pasión y debilidad. Pero ello no quiere decir que estos “compañeros de vida” sean los únicos y los mejores, cada cual tendrá sus preferencias y debilidades por unxs u otrxs.

3-  Muchos de los fragmentos del texto los he ido recopilando de información que he buscado en internet y luego yo he ido integrando y dando otra forma y perspectiva al tema, es por ello, que, advierto que no son “cosecha mía propia”, sino que, repito, es información, mayormente, que he ido encontrando en internet, y he ido moldeando a mi gusto.

4-  Dicho todo esto, comencemos con mi publicación de hoy, que espero que te resulte interesante y al final te animes, si aún no lo has hecho, a compartir tu vida con un compañerito de estos.





La interacción diaria con los animales puede ser más importante de lo que mucha gente piensa. De acuerdo con los centros para el control de enfermedades y muchos estudios e investigaciones publicadas, la presencia de un animal en la vida diaria de una persona puede resultar muy beneficioso: puede tener un impacto positivo en su salud y, en general, en su bienestar (social, personal, etc.).

Muchos de los que ya tenemos, para mí la suerte, de tener un/a compañero/a de vida a nuestro lado sabemos que esto nos aporta infinidad de beneficios: compañía, cariño, afición,  amor, amistad, felicidad…

Hoy, para aquellos que aún no estén muy convencidos de la importancia y lo beneficioso que puede ser el tener un compañero de vida a nuestro lado, os quiero un poco sobre ello.



¿QUÉ BENEFICIOS PUEDE TENER PARA MÍ O MI FAMILIA EL QUE ME ACOMPAÑE (NOS ACOMPAÑE) UN COMPAÑERO DE VIDA?

1. Un compañero de vida es beneficioso para los niños

Muchas investigaciones han demostrado que, por ejemplo, tener un perro en el hogar aumenta el bienestar y ayuda a la salud de los que están en él. Por ejemplo, según un estudio presentado por la publicación holandesa Pediatrics, los niños que viven con perros tiene menos posibilidades de presentar ciertas infecciones en los oídos o problemas respiratorios. Un estudio de la universidad de California en Davis menciona que los niños que leen con perros cerca aprenden más rápido y con más facilidad. Y  otro, que los bebés que conviven con animales domésticos tienen menos probabilidades de sufrir alergias cuando sean mayores.



2. Puede resultar como una medicina preventiva

Tener una mascota en casa se considera una medicina preventiva porque promueve la salud y evita futuros problemas. Muchos estudios han demostrado que la salud de las personas es mejor cuando hay un perro cerca. 

Se ha comprobado que tener un animalito en el hogar puede ayudar a la salud de las personas mayores, embarazadas y enfermos. Y es que no sólo nos alegran el día, sino que también nos hacen tener un corazón más sano: provocan mayor variabilidad en el ritmo cardiaco y se reduce así, el riesgo de padecer enfermedades de corazón.   Según estudios del Instituto de Investigación Médica Baker, de Melbourne, Australia, un animal de compañía puede reducir la presión arterial de su dueño àSe observó que tanto los hombres como las mujeres que vivían con una mascota tenían una presión sistólica menor y los triglicéridos más bajos que los que no tenían perros, e incluso la supervivencia a los infartos de miocardio era más elevada en las personas que gozaban de la compañía de un cánido. La gente que posee en su familia un miembro de la raza perruna, visita poco al médico, gasta menos en medicamentos para la tensión alta y está en mejor condición física.
  
Y ya no sólo a nivel físico, sino también psicológico: ayudan a mejorar el deterioro mental, el estrés, los dolores y depresión, etc. Además, muchos compañeros de vida, como lxs perrxs o lxs gatxs, incluso “adivinan” nuestros estados de ánimo, apoyan su cabecita en nuestra pierna justo el día que necesitamos un aporte extra de cariño. Su mirada sincera, sus ojos profundos, nos reconfortan y siempre nos dicen muchas más cosas que mil palabras juntas. Hasta saben cuándo tenemos un mal día. Son nuestros terapeutas de cabecera.

Siguiendo con el tema de la salud psicológica, muchos estudios han demostrado, como ya he comentado, que tener un compañero de vida mejora nuestro bienestar y salud psicológica à compartir nuestra vida con un compañero de vida disminuye el nivel de estrés, los estados de ánimo mejoran y ayudan a quienes sufren depresiones. Concretamente, la doctora Karen Allen, de la Universidad Estatal de Nueva York en Búfalo, pudo demostrar que las personas que viven con perros o gatos reaccionan mejor frente a la tensión, se recuperan antes y cometen menos errores en el cálculo mental que las que no tienen una mascota en su casa. Además, quienes hicieron el experimento en presencia de sus mascotas, consiguieron mejores resultados ante el estrés que cuando las realizaron en compañía de un familiar o de un amigo.




3. Nos aportan compañía

Tener un perro en casa reduce la soledad de aquellas personas más faltas de cariño o aquellas que tienen que superar la pérdida de algún cónyuge o familiar. La sensación de abandono o soledad se reduce con un perro porque ayuda a sentirse en compañía, querido y amado. Nos hace sentir que no estamos solos.





4. Nos crea obligaciones

Tener una mascota implica muchas obligaciones para mantenerlx atendidx y en buen estado. Por ejemplo, el hecho de tener que sacarlo a pasear implica una obligación, que, a pesar de sonar así de “mal”, puede aportarnos beneficios: nos puede ayudar a conocer nuevas personas, relacionarnos, despejarnos del estrés rutinario, pasear, disfrutar de la naturaleza de los parques, etc.





5. Aparte de “obligaciones”, también nos aportan diversión

Obviamente, este es uno de los puntos más innegable. Nuestros compañeros de vida nos regalan momentos de risas y diversión a diario.  Sus travesuras nos hacen sonreír un poco más cada día.




6. Nos pueden, no siempre, proporcionar seguridad

Aportan seguridad a nuestro hogar y a nivel personal. Ellos siempre se alertan los primeros ante cualquier situación de peligro y esto nos provoca una sensación de mayor seguridad, tranquilidad  y confianza.

Ojo, esto no quiere decir que los tengamos que usar para ello o que esto siempre vaya a ser así, ya que no todos los animales están preparados para ser guardianes.



8. Los compañeros de vida, mejoran las relaciones

Los animales en general nos ayudan a mejorar las relaciones con el resto de personas. Nos aportan un equilibrio emocional que será beneficios para el contacto con el resto. Además, nos ayudan a ser más responsables, cariñosos, atentos… y, aumentan el contacto social.
Podríamos decir, no siempre, claro está, como en todo hay excepciones, que nos hacemos más humanos cuando estamos en compañía de un perro: La empatía con los otros seres vivos se incrementa, consigue que nos comportemos mejor con nuestros semejantes.



9. Nos aportan FELICIDAD

La mayoría de las personas que tienen, por ejemplo, un perro en casa mejoran su autoestima y seguridad en ellos mismos  y demuestran ser más felices que los demás. A nivel familiar, es una experiencia muy aconsejable.




¿Crees que esto es todo? Pues no. Sigamos.
Cuando un amigo de estas características entra en nuestras vidas, el tono vital de la casa se eleva, es más positivo, más relajado, más amable y divertido. Ellos afianzan el sentimiento de seguridad y confianza de las personas que los cuidan.

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 BENEFICIOS DE TENER UN COMPAÑERO DE VIDA PARA TU/S HIJX/S

Desde la prehistoria hasta nuestros días, los animales domésticos han desempeñado un papel muy importante (relevante) en la relación con los niños. Gracias a esa estrecha convivencia, son modelos a seguir para las distintas etapas de desarrollo de los pequeños, y les enseñan valores tanto fundamentales, como conocimientos básicos sobre la vida y la muerte, el crecimiento, el sexo y la reproducción, la salud, el dolor y la enfermedad, la  higiene y los cuidados básicos sobre alimentación, y un largo etc. que iremos desarrollando a lo largo del artículo.

En los años 80, el National Institute of Health, comenzó a investigar, y fue en 1987 cuando publicó su primer gran trabajo: “Salud y beneficios de los animales de compañía”. No ha sido hasta hace pocos años cuando se ha incidido en estudios más profundos que constatan los beneficios sobre nuestros hijos en la tenencia de una mascota en casa.

Los niños aprenden valores positivos en su compañía. Valoran al ser vivo que han de cuidar y alimentar y reciben a cambio montones de cariño. Su autoestima se eleva al sentirse útiles, se reducen sus momentos de ocio, aprenden a hacer frente a una responsabilidad ineludible y a valorar y respetar a los otros seres vivos.
La inteligencia emocional se incrementa en los pequeños de la casa cuando están en compañía de un amigo peludo.





El papel de los Animales en el Desarrollo Infantil

Un importante número de estudios empíricos han investigado cómo los niños interactúan con las mascotas y su visión en la relación con los animales (mascotas incluidas). Estos estudios han terminado demostrando la ínter actuación de los menores con animales domésticos. Por ejemplo, los niños pequeños (2-3 años) tienen más probabilidades de golpear, empujar, o agarrar a sus mascotas (comportamientos que podrían ser considerados agresivos) que los niños mayores. De 3 a 4 años de edad, los niños tienden a acariciar a sus mascotas más que dedicarse a otras conductas, mientras que los niños de entre 5 y 6 años de edad, en general abrazan, estrujan y masajean a sus animales de compañía, lo que sugiere un contacto más sofisticado y "suave", con patrones y relaciones sociales más empáticos. Estos cambios basados ​​en la edad y en los citados patrones de comportamiento de las interacciones con los animales domésticos van, generalmente, paralelos a los cambios que sufren los niños en el desarrollo de los patrones de interacción con los seres humanos, incluidos los padres, hermanos y compañeros.

El examen de las actitudes de los niños hacia las mascotas revela que muchos de ellos desarrollan una rica gama de atributos sociales hacia estos animales, y no sólo hacia los animales, sino también hacia el resto de seres vivos.
No obstante, tenemos que aclarar que la relación con las mascotas normalmente es complementaria a otras (por ejemplo la relación entre iguales), y no un sustituto para las relaciones humanas.

En una nueva investigación sobre los vínculos entre los seres humanos y los animales, los terapeutas han descubierto que las mascotas proporcionan inesperados beneficios psicológicos para los niños más allá de lo obvio.



A modo de resumen, una investigación con niños en edad de pre-escolar, realizada por psicólogxs de la Universidad Estatal de Oregón, encontró que:
1)  Enseñar a los niños a cuidar un cachorro, aumenta sus capacidades sociales para el futuro.
2) Tener mascota hace que los niños cooperen más y participen mas.
3) Tener una mascota mejora la capacidad de los niños para desarrollar habilidades, como por ejemplo ser responsables, o ponerse en el lugar del animal y tratar de sentir cómo el animal se siente. Y esta empatía la pueden aplicar después hacia las relaciones con otros niños.


Por tanto, ¿cuáles son los beneficios de tener mascota para los niños?

1.   Beneficios para la salud:

a.   Disminuye el estrés, lo que ayuda a que sean  niños menos agresivos.
b.    Mejora la autoestima y el bienestar psicológico, pues se sienten muy queridos por su mascota y, al cumplir con la obligación de alimentarlos, limpiarlos y cuidar de ellos, estamos creando en su interior una sensación de utilidad y motivación muy positivas.
c.    Disminuye el número de afecciones psicosomáticas: ansiedad, dolor de cabeza o abdominal, alteraciones del apetito, o problemas cutáneos.
d.    Exige un incremento en la actividad física, hecho de relevada importancia, dado el sedentarismo que hoy en día padecen nuestros hijos.
e.   Regula el ritmo cardiaco y la tensión arterial, el mero acto de acariciar nuestra mascota.
f.      Es un escape para los impulsos de acicalamiento de los residuales de primates que aún conservamos


2.   Beneficios socioeducativos:

a.   El niño que pasea un perro se beneficia de las relaciones sociales en la calle al atraer la atención de otros viandantes e iniciar conversaciones, estableciendo incluso nuevas relaciones.
b.    Acelera el desarrollo psicomotor a través del juego, el ejercicio, la persecución, las risas, etc.
c.    Ejerce un papel de protección que comparte con los progenitores: no sólo papá y mamá son los que me quieren y me cuidan. Les aporta seguridad cuando los padres están ausentes.
d.    Invita a los niños a imitar a los adultos en su rol de cuidadores, por lo que ellos pasan a ser los papás de la mascota y esto hace que desarrollen el valor de la responsabilidad.
e.   Proporciona un vínculo con la realidad para mejorar la estabilidad emocional
f.      Se crea una relación de confianza mutua que promueve el conocimiento de sí mismo
g.    Proporciona aceptación y amor sin prejuicios
h.    Ofrece una enseñanza natural sobre conceptos como el nacimiento, parto, enfermedad, dolor, muerte, sexualidad, etc. con lo que se convierte en su profesor particular en la escuela de la vida.



Como resumen, o conclusión, podríamos decir que tener un compañero de vida puede tener en nosotros, y en nuestra familia, muchos beneficios, tanto a nivel físico como psicológico.




Por último, si finalmente te decides a tener un compañero de vida, como así le llamo yo a mi perrita, deberías de tener en cuenta una serie de cosas antes de hacerlo:

Puede pasarle a cualquiera. Ves un precioso gatito rayado, con las patitas blancas y ojos verdes buscando atención desesperadamente. O quizás es un hermoso Labrador cuya cola parece moverse sólo por ti. Echas una mirada y la siguiente cosa que ves es que estás caminando por los pasillos de comida de animales en el supermercado.

Si eres como la mayorí­a de nosotros, enamorarte de un animal es muy fácil. ¡Y no me extraña! Porque compartir tu casa con un amiguito de cuatro patas puede ser uno de los mayores placeres de la vida.

Pero adoptar un animal de compañía, por lo tanto, es una gran decisión. Los perros y los gatos requieren mucho tiempo y dinero, y una responsabilidad de más de 15 años en muchos casos. El tener un animal puede ser muy recompensante, pero sólo si realmente has meditado esta decisión antes de adoptar un compañero.


Cosas que deberíamos considerar antes de tomar esta decisión:

El hecho de que estés pensando en adoptar un animal de un refugio significa que eres una persona responsable y humanitaria. Pero antes de tomar la decisión de traer un amigo peludo a tu vida, tómate un momento para pensar en estos puntos:
¿Por qué quieres un animal de compañía? Es increí­ble cuántas personas no se preguntan esto tan simple antes de acoger uno. Adoptar un perro o gato simplemente porque es lo que la gente "hace" o porque los niños han estado lloriqueando por un cachorro generalmente termina en un gran error. No te olvides de que algunos de ellos pueden estar contigo 10, 15 o incluso 20 años.
¿Tienes tiempo? Perros, gatos y otros animales de compañí­a no pueden ser ignorados simplemente porque estés cansado u ocupado. Necesitan comida, agua, ejercicio, cariño y compañí­a cada dí­a de cada año. Muchos animales en los refugios están allí­ porque sus dueños no pensaron realmente cuánto tiempo llevaba cuidar de ellos.
¿Puedes permitirte económicamente una adopción? Los costes de mantener un animal pueden ser bastante elevados. Licencias, clases de entrenamiento, esterilización y castración, cuidados veterinarios, cepillados, juguetes, comida, arena de gatos, y otros gastos son cosas que suman rápidamente
¿Estás preparado para ocuparte de los problemas que puede ocasionar? Infestaciones de pulgas, muebles arañados, accidentes de animales que no están educados para estar en una casa y emergencias médicas inesperadas son lamentables pero son aspectos comunes a la tenencia de un animal de compañía.
¿Puedes tener uno en el lugar donde vives? Muchas comunidades de vecinos no permiten animales, y la mayorí­a de ellos tienen restricciones. Asegúrate de cuáles son antes de traer un compañero peludo a casa. También es posible que en tu casa, no todos estén conformes con la llegada de un animal. Es importante tomar la decisión en familia y evitar que pasado el tiempo te presionen para sacar al animal del hogar.
¿Son tus hábitos de vida adecuados para el animal que tienes en mente? El tamaño del mismo no es la única variable en la que tienes que pensar aquí­. Por ejemplo, algunos perros pequeños como los terriers son muy activos. Necesitan mucho ejercicio para poder calmarse, y generalmente ladran con cualquier ruido. Por otro lado, algunos perros grandes son muy tranquilos y están felices y contentos con sólo dormir en el sofá todo el dí­a. Antes de adoptar haz algo de investigación, de este modo te aseguras de elegir el animal que encajará con tu estilo de vida.
¿Sabes quién cuidará de él cuando estés de viaje o de vacaciones? Necesitarás tener amigos o vecinos de confianza o dinero para pagar a un refugio o un hostal.
¿Podrás ser un dueño responsable? Tener tu nuevo amigo esterilizado o castrado, obedecer las leyes comunitarias o las licencias, mantener puestos los chips de identificación en el animal son cosas que forman parte de ser un dueño responsable. Por supuesto, dar al nuevo integrante de tu familia amor, compañerismo, ejercicio, una dieta sana y cuidado veterinario regular también son esenciales.

 


Escribo esto porque hay mucha gente que no piensa en nada de esto, cogen al compañero y cuando ven la multitud de “obligaciones” deciden abandonarlo, y me joroba, y mucho, ¿te imaginas cómo se puede sentir el o la pobre cuando lo/a abandonas? Y NO ME VALE LA RESPUESTA DE: “ES SÓLO UN ANIMAL”, porque no, PORQUE SON COMPAÑEROS DE VIDA y se merecen que les proporcionemos lo mejor de nosotros, porque es lo que ellos nos van a dar a nosotros, y qué mínimo que devolver con la misma moneda. Por eso, de corazón, antes de tomar la decisión precipitadamente, pregúntate, ¿estoy preparadx para mantener y cuidar a un animal durante toda su vida? No olvides que cuando adoptas estás comprometiéndote a cuidarle por el resto de su vida.


Es cierto, ésta es una larga lista de preguntas. Pero si echas una vista rápida a un refugio entenderás porqué el contestar estas preguntas antes de adoptar un animal es tan importante.
Por favor, no cometas el mismo error. Piensa antes de adoptar. Compartir tu vida con un compañero animal puede traer compensaciones increí­bles, pero sólo si estás dispuesto dedicarle el necesario tiempo, dinero, responsabilidad y amor por el resto de su vida.




Por favor, hazlo con cabeza, cuídales, respétales, ámales,  NO LES ABANDONES. 

En definitiva, bajo ningún concepto los maltrates (el abandono es también una forma e maltrato, en este caso psicológico).

Ellxs darían todo por ti, que mínimo que devolver, al menos, lo mismo que vas a recibir.







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http://www.aces.edu/pubs/docs/U/UNP-0058/UNP-0058.pdf

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